Disfruta en plena ola de calor

Pasar una ola de calor es un fastidio, pero con algunas precauciones y estrategias, puedes mantenerte fresco y seguro, algunos consejos útiles:

Hidratación: Bebe mucha agua, incluso si no tienes sed. Evita las bebidas alcohólicas y las que contienen cafeína, ya que pueden deshidratarte.

Ropa ligera: Usa ropa holgada, de colores claros y hecha de materiales ligeros como el algodón. También, usa un sombrero de ala ancha y gafas de sol cuando estés al aire libre.

Refugio del calor: Permanece en interiores durante las horas más calurosas del día, generalmente entre las 11 a.m. y las 4 p.m. Si no tienes aire acondicionado, considera pasar tiempo en lugares públicos climatizados como centros comerciales, bibliotecas o cines.

Enfriamiento del hogar: Mantén las persianas o cortinas cerradas para bloquear el sol. Usa ventiladores para circular el aire. Coloca paños húmedos en la piel o toma duchas frías para bajar la temperatura corporal.

Alimentos ligeros: Consume comidas ligeras y frecuentes. Evita los alimentos pesados y calientes.

Actividades físicas: Limita las actividades físicas extenuantes, especialmente durante las horas de más calor. Si necesitas hacer ejercicio, hazlo temprano en la mañana o tarde en la noche.

Protección solar: Usa protector solar con un alto factor de protección (SPF) para proteger tu piel de las quemaduras solares.

Cuidado con los más vulnerables: Presta especial atención a los niños, ancianos y mascotas, ya que son más susceptibles a los efectos del calor extremo. No dejes nunca a niños o mascotas en vehículos estacionados.

Reconoce los signos de golpe de calor: Familiarízate con los síntomas del golpe de calor, que incluyen temperatura corporal muy alta, piel roja y seca, pulso rápido y fuerte, y confusión. Si sospechas que alguien tiene un golpe de calor, busca atención médica de inmediato y enfría a la persona con cualquier medio disponible.